Soy una de las personas que está en contra de celebrar días como este, ya que pienso que deberían ser todos los del año, pero bueno. También hay que honrar y recordar a las mujeres que hicieron posible nuestro camino hacia la igualdad, esas mujeres que lucharon y pelearon con todas sus fuerzas y que han conseguido grandes logros en nuestra sociedad.
En mi opinión nos queda muuuuucho por recorrer. Aunque hayamos conseguido que las mujeres puedan trabajar, que puedan estar en puestos laborales que antiguamente consideraban masculinos y que puedan tener las mismas posibilidades que los hombres (entre otras cosas), no debemos dejar de luchar por nuestros derechos.
Me parece repugnante que se pongan límites sólo por tener un cuerpo diferente. Porque es eso, un cuerpo diferente. Somos personas, de diferente religión, color, altura, edad, sexo, etc, pero al fin y al cabo, SERES HUMANOS.
Me emociona saber que las cosas están cambiando, y un caso muy especial salió a la luz en las pasadas Navidades. Un catálogo de juguetes muy particular, en el que salían niñas jugando con motos y niños jugando con cocinitas. ¡¡¡FANTÁSTICOO!! De verdad que me parece genial y me encanta (estoy escribiendo esto a la vez que estoy sonriendo).
Estoy harta de los estereotipos que se impregnan en las personas antes de nacer, porque claro, si eres chico tienes que tener ropita azul y si eres chica, rosa. Si eres chico, te van a comprar un montón de coches y motos, y si eres chica, muñecas y animalitos. No hay que olvidar que los niños son unos campeones y las niñas unas princesas.
Y es desde aquí, desde la infancia, donde tenemos que empezar a cambiar estas ideas. Ellos y ellas son el futuro, y si desde tan pequeños les metemos ideas que separan ambos sexos, de mayores lo verán de la misma forma.
Hay que empezar a formar a las personas desde muy temprano, teniendo en cuenta que los hombres y las mujeres son IGUALES. Dejemos a un lado los papeles de hogar típicos, tenemos que enseñar que todos y todas somos capaces de hacer lo que queremos, independientemente del género. Hay que enseñarles que en casa papá también sabe cocinar y limpiar y que a mamá le gusta ver el fútbol (cosa que en los cuentos, por ejemplo, antiguamente no se veía y ahora sí)
Mi caso en particular, siempre nos han tratado mis padres a mi hermano, a mi hermana y a mi de la misma manera, pero a la hora de llevar las funciones... "Pregúntale a Papá si te deja", "Pregúntale a mamá que vamos a cenar", "El coche de Papá", "(A mi madre) Te recojo la cocina"... Son ejemplos muy claros (y bastante feos) de que aunque mis padres hayan intentado implantar la igualdad, ellos mismos no lo demuestran.
Soy una educadora infantil con las ideas muy claras.
Quiero un mundo en el que las condiciones y las posibilidades sean iguales para las mujeres y para los hombres.
Quiero un mundo en el que los niños puedan mostrar sus sentimientos sin miedo a lo que puedan pensar de ellos.
Quiero un mundo en el que las niñas practiquen los deportes que las gusten sin recibir etiquetas de ningún tipo.
Quiero un mundo en el que las mujeres puedan tener altos cargos ocupacionales.
Quiero un mundo en el que los hombres piensen como las mujeres.
Quiero un mundo en el que las mujeres piensen como los hombres.
En resumen... Quiero un mundo que tenga un escalón para la mujer a la misma altura que el hombre.
No quiero desigualdades, no quiero diferencias, no quiero rechazos, no quiero discriminaciones, no quiero acoso laboral, no quiero insultos, no quiero machismo...
Y es por esto y por muchas cosas más por las que me considero una gran mujer, luchadora, activa, viva, con voz, soñadora, capaz de hacer lo que quiero y que intento conseguir lo que deseo.
Por ello, hoy y todos los días del año...¡¡quiero felicitar a todas las mujeres del mundo!!
Somos geniales, somos maravillosas, somos fantásticas, somos preciosas, somos luchadoras, somos sociales, somos madres, somos hijas, somos profesoras, somos policías, somos estudiantes, somos valientes, somos únicas, somos mujeres...
Pero ante todo...
SOMOS PERSONAS.
Me parece repugnante que se pongan límites sólo por tener un cuerpo diferente. Porque es eso, un cuerpo diferente. Somos personas, de diferente religión, color, altura, edad, sexo, etc, pero al fin y al cabo, SERES HUMANOS.
Me emociona saber que las cosas están cambiando, y un caso muy especial salió a la luz en las pasadas Navidades. Un catálogo de juguetes muy particular, en el que salían niñas jugando con motos y niños jugando con cocinitas. ¡¡¡FANTÁSTICOO!! De verdad que me parece genial y me encanta (estoy escribiendo esto a la vez que estoy sonriendo). Estoy harta de los estereotipos que se impregnan en las personas antes de nacer, porque claro, si eres chico tienes que tener ropita azul y si eres chica, rosa. Si eres chico, te van a comprar un montón de coches y motos, y si eres chica, muñecas y animalitos. No hay que olvidar que los niños son unos campeones y las niñas unas princesas.
Y es desde aquí, desde la infancia, donde tenemos que empezar a cambiar estas ideas. Ellos y ellas son el futuro, y si desde tan pequeños les metemos ideas que separan ambos sexos, de mayores lo verán de la misma forma.
Hay que empezar a formar a las personas desde muy temprano, teniendo en cuenta que los hombres y las mujeres son IGUALES. Dejemos a un lado los papeles de hogar típicos, tenemos que enseñar que todos y todas somos capaces de hacer lo que queremos, independientemente del género. Hay que enseñarles que en casa papá también sabe cocinar y limpiar y que a mamá le gusta ver el fútbol (cosa que en los cuentos, por ejemplo, antiguamente no se veía y ahora sí)Mi caso en particular, siempre nos han tratado mis padres a mi hermano, a mi hermana y a mi de la misma manera, pero a la hora de llevar las funciones... "Pregúntale a Papá si te deja", "Pregúntale a mamá que vamos a cenar", "El coche de Papá", "(A mi madre) Te recojo la cocina"... Son ejemplos muy claros (y bastante feos) de que aunque mis padres hayan intentado implantar la igualdad, ellos mismos no lo demuestran.
Soy una educadora infantil con las ideas muy claras.
Quiero un mundo en el que las condiciones y las posibilidades sean iguales para las mujeres y para los hombres.
Quiero un mundo en el que los niños puedan mostrar sus sentimientos sin miedo a lo que puedan pensar de ellos.
Quiero un mundo en el que las niñas practiquen los deportes que las gusten sin recibir etiquetas de ningún tipo.
Quiero un mundo en el que las mujeres puedan tener altos cargos ocupacionales.
Quiero un mundo en el que los hombres piensen como las mujeres.
Quiero un mundo en el que las mujeres piensen como los hombres.
En resumen... Quiero un mundo que tenga un escalón para la mujer a la misma altura que el hombre.No quiero desigualdades, no quiero diferencias, no quiero rechazos, no quiero discriminaciones, no quiero acoso laboral, no quiero insultos, no quiero machismo...
Y es por esto y por muchas cosas más por las que me considero una gran mujer, luchadora, activa, viva, con voz, soñadora, capaz de hacer lo que quiero y que intento conseguir lo que deseo.
Por ello, hoy y todos los días del año...¡¡quiero felicitar a todas las mujeres del mundo!!
Somos geniales, somos maravillosas, somos fantásticas, somos preciosas, somos luchadoras, somos sociales, somos madres, somos hijas, somos profesoras, somos policías, somos estudiantes, somos valientes, somos únicas, somos mujeres...
Pero ante todo...
SOMOS PERSONAS.
Lorena Sánchez
Adjunto la noticia del catálogo de juguetes:
Bravo Lore! me ha encantado esta entrada. Me ha pillado de sorpresa y no me la esperaba!
ResponderEliminarRastis.
Qué buena noticia el catálogo. Muchas gracias por compartir tu experiencia de género en casa, nos hace humanos en lo humano.
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