lunes, 25 de mayo de 2015

¡¡Se acabó el curso!!

Llegamos al fin de la asignatura, por lo que me gustaría hacer un repaso de las actividades más llamativas que hemos hecho a lo largo del curso y escribir una breve opinión de cada una.

Recuerdo que los primeros días todo era un caos. Nos parecía impresionante tener que estar desde las 15:30 hasta las 20:00 en una misma asignatura. El hecho de dividir los turnos me parecía bien, pero la mayoría de la gente no lo aceptó. 

Por otro lado, al principio "se iba a clase cuando se quería" y "se salía de clase cuando se quería". Algo que no me ha gustado nada porque muchas compañeras han abusado de ello, y llegando a las 15:30, se iban en el descanso, alrededor de las 17-17:30. Me parece una falta de respeto tanto a nosotras como alumnas, como a la profesora.

Las primeras clases estuvieron orientadas hacia la película de Maléfica y realizamos un teatro foro. Me gustó bastante esas sesiones ya que la película en sí me encantó, y además escuchamos muchas opiniones sobre la historia de cada una de las compañeras. 

Clases después realizamos un taller de muñecas. Teníamos que desdibujarlas la cara con disolvente, y pintarlas como nosotras queríamos. Además también confeccionábamos la ropa según nuestro gusto. Salieron muñecas preciosas, otras con pendientes y tatuajes, una embarazada, una recién levantada... En fín, muchísimas muñecas que deberían existir hoy en día, ya que se aproximan a la realidad. Esta clase es la que más me ha gustado a lo largo de todo el año, sobre todo por la libertad que hemos tenido a la hora de realizar el proceso, de pintarla o de vestirla.

Después realizamos una salida al Parque del Buen Retiro, en Madrid. Allí vimos una exposición en el Palacio de Cristal, donde estaba la Bella Durmiente como si fuese una persona real. Impactaba bastante, la verdad. Una vez vista, fuimos a realizar mandalas con elementos naturales, como hojas secas, palitos de los árboles, piedras y arena. Me gustaba la idea de realizarlo, hasta que la gente arrancaba las flores y las ponía "para hacerlo más bonito". No me gustó ver que la gente disfrutaba arrancándolas.

La siguiente clase estuvo orientada a la realización de un mandala comestible. Esta vez, utilizamos obleas, chocolate líquido, lacasitos, nata montada y demás elementos decorativos. Particularmente, me pareció una actividad genial. Explotábamos nuestro interior al máximo y dejábamos fluir nuestros sentimientos. Una vez más, la libertad cobraba una gran fuerza en esta actividad.

Días más tarde, realizamos en clase un taller para dedicarnos a nosotras mismas de pequeñas, una frase. Consistía en tener una foto nuestra de hace años cerca y pensar frases que nos dedicásemos al vernos. Mi frase fue "Aprovecha cada momento como si fuera el último, porque el minuto que se va no vuelve jamás". Esto es porque de pequeña muchas veces no he hecho las cosas como realmente quería y al final me he acabado arrepintiendo, además de no expresar lo que verdaderamente sentía a las personas que quería y amaba, y al final te das cuenta cuando ya no están. La frase, en cuestión, se realizaba sobre un trozo de tela, bien para realizar un cojín, una pulsera... Lo que queríamos. Mi frase al ser tan larga, la pinté y cosí elementos alrededor para que quedase más bonito.

Y por último, la exposición de los vídeos finales de la asignatura. En general me gustaron mucho los vídeos. Había muchos diferentes y estaban muy bien trabajados. Algunos otros no los entendía o no me gustaban, pero oye... ¡Para gustos, los colores! Creo que este vídeo ha servido para reflexionar sobre la asignatura y creo que debería realizarse el resto de años, haciendo hincapié en la temática y en la duración sobre todo.


¡¡ Y eso es todo !! En general ha sido una asignatura que la he llevado bien. No esperaba que fuese de esta manera y creo que ha sido muy original terminar la asignatura realizando un video personal. Además, como reflejo en mi vídeo, la libertad que hemos tenido para realizar todos los trabajos ha sido muy gratificante e importante, y creo que deberíamos llevarla a la vida diaria. También hay que tomarse las cosas con más calma y dejar las prisas a un lado. El tiempo avanza pero tenemos que vivir. Que mejor frase para terminar esta entrada que... 

¡Las cosas de palacio, van depacio! :)




Lorena Sánchez

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